Los operativos de control de tránsito y las infracciones
Se realizan sistemáticamente y en puntos aleatorios, con la finalidad de neutralizar muchas infracciones de diversos tipos.
Los operativos de control de tránsito están demostrando ser una pieza fundamental del orden en todo el municipio y una garantía constante de tranquilidad para todos los vecinos, tanto para los que conducen sus vehículos como para los que transitan a pie. Se trata de una iniciativa impulsada por Diego Kravetz cuando era Subsecretario de Seguridad y Movilidad Sustentable, que continúa hoy en calidad de Jefe de Gabinete, ambos cargos, por supuesto, dentro de la Intendencia de Lanús. Normalmente nos referimos aquí a la realización de los operativos en distintas zonas del municipio, ya que, como se mencionó en varias ocasiones, es la aleatoriedad y la rotación constante de estos focos de intervención una de las claves elementales de su eficacia, ya que de esta manera se garantiza la baja predecibilidad de los mismos y que los infractores no puedan anticiparse e impostar conductas falsas con fines distractivos.
El playón de incautados sigue en marcha
En el playón de incautados ya se compactaron 49 autos y 242 motos en desuso. Lo recaudado es destinado a la Fundación Pupi. En el marco del Programa Nacional de Compactación, en el playón municipal está ubicado en Máximo Paz y Jujuy se compacta y reduce el material de motos y automóviles. El dinero que se obtiene de la reducción es donado a la Fundación Pupi que se encuentra en Remedios de Escalada.
En efecto, los operativos apuntan fuertemente hacia los infractores debido a que son ellos los que justifican toda esta parafernalia de medidas e intervenciones orientadas hacia la seguridad vial y la coexistencia pacífica y virtuosa de todos los ciudadanos en su utilización cotidiana del espacio público y en la realización de sus menesteres diarios. Estas infracciones son varias y de distintos tipos. Están las infracciones que representan meros problemas viales, como todas las que refieren a la aplicación correcta de las conductas que prescribe la normativa y que aseguran el buen funcionamiento de todas las partes que componen el sistema vial. Eso por un lado.
Pero por otro lado también están las infracciones que, además de ser problemas de vialidad también implican situaciones conflictivas desde el punto de vista de la criminalidad organizada y del delito a gran escala, especialmente en relación con el narcotráfico, que es uno de los grandes flagelos que azotan a nuestra sociedad en todo su conjunto. Esto se debe a que muchos vehículos robados son empleados con finalidades de narcomenudeo y traslado de estupefacientes en ciertos casos y en otros meramente para que se desplacen los maleantes que viven fuera de la ley y que implican una amenaza constante al orden social.
